yo creo sinceramente que el nuevo año está afectando de maneras muy extrañas a la gente.
Acabo de recibir un mail a modo de felicitación de año nuevo explicandome la última anécdota acontecida con su pareja.
muy bien, no sé si el relato forma parte de la felicitación o bien és regalo adjunto con lo cual, efectivamente se me olvidó dar las gracias.
copio y pego.
"...una vez puestas las esposas a L y encapuchada al más puro estilo viernes 13, me disponía a gozar de ella cuando me di cuenta que había perdido las llaves de las esposas. Por unos momentos cundió el pánico, ella me pedía a gritos que le sacara la capucha, que en un hora se iban a presentar los del desayuno y que yo era un gran cabrón por haberla convencido de tal disparate. Estaba fuera de si.
Yo no le saqué el saco de la cabeza, la oia gritar pero si encima le viera la cara de miedo que le azotaba el rostro hubiera sido todo mucho peor. Salí un momento a la calle para comprar una pequeña sierra. Y mientras estaba serrando sentado encima de ella entraron efectivamente los del desayuno.
La camarera soltó un grito y la bandeja con el zumo naranja y café con leche. Empezó a correr por los pasillos y nosotros dos desnudos -por fin pude cortar la cadena- detrás de ella gritandole que todo aquello era de mentira, una fantasía sexual, que no lo volveriamos a hacer, que lo habíamos visto por internet, que en maldita malaria lo hacían a diario, que perdón."
espero que los efectos secundarios de la fiesta de fin de año no se alarguen mucho. yo ya no estoy para muchas cosas.