no me pregunten que hacía yo un sabado a las 8h de la mañana en el parque de la ciutadella.
tropecé con una piedrecilla de 8 mm de diametro y por fin abrí los ojos. Y allí estaban, toda una panda de locos por el tai chi que en vez de aprovechar para dormir todavía un par de horas más, se dedicaban con gran esmero a encadenar lentos y precisos movimientos al aire. muy bonito...Pero mis párpados se acabaron de abrir cuando vi detras de ellos, a un abuelo de unos 80 años con baston incluido enseñando a un chaval de unos 15. La imagen enseguida me pareció algo familiar, aunque todavía no podía aseverar en que... Me acerqué sigilosamente y entoces vi como el viejo le mostraba(perdiendo el equilibrio) unos movimientos que el chico tenía que repetir;
"dal cela, pulil cela, dal cela pulil cela...que no coño!!!!! como si tuvieras un coche delante y lo estuvieras lavando" (con un acento andaluz de lo más cerrado).
No daba credito a lo que veía.
Entonces di media vuelta y cercioré que levantarse tan temprano no puede ser bueno de ninguna manera.